Reparto: James Franco, Val Lauren, Travis Mathews, Christian Patrick...
Estreno en España: ---
Año de producción: 2013
País: EEUU
Los gustos cinéfilos no cambian pero sí avanzan y se
modifican con el tiempo. Por eso que una película como ésta me haya parecido tan buena solo puede explicarse por mi reciente interés por el cine experimental y por
propuestas arriesgadas y radicalmente extremas que se alejan de cualquier
concepto de cine argumental o tradicional. Codirigida por James Franco y Travis Mathews, la película
intenta recrear los 40 minutos censurados de la polémica película protagonizada
por Al Pacino en 1980, Cruising (en España conocida como A la caza). La famosa
cinta que más de un disgusto le dio a su director William Friedkin (el hombre
que en 1973 hizo la mejor película de terror de la historia del cine) por el
tema que trataba y que a punto estuvo de costarle la vida debido a las múltiples
amenazas y presiones que tuvo que soportar (por suerte no sufrió el mismo
destino que el fallecido director italiano Pier Paolo Pasolini ya que el
estreno de su famosa obra Los 120 días de Sodoma le costó la vida en 1975).
Lo más interesante de esta peculiar película es sin duda
que es una cinta que bien podría ser calificada como un documental, un falso
documental, una película que habla sobre la industria del cine (género que me
encanta), una comedia bastante negra e incluso de una película puramente
pornográfica para los más radicales. Yo creo que es todo eso a la vez y que bebe de todos los
géneros mencionados anteriormente de ahí lo atractiva que me resulta.
Protagonizada por el polifacético James Franco, el único
hombre para el que los días tienen más de 24 horas porque aparte de actuar sin
descanso: dirige, escribe, pinta, desfila por pasarelas (teniendo en cuenta su
físico lo raro sería que no lo hiciera), es alumno universitario y profesor de
la misma (y quien sabe si también es conductor de autobuses para sus propios
alumnos) y todavía se permite el lujo de organizar sus propias galerías
fotográficas y de ser un constante defensor de los derechos sociales. La película se sostiene por unas conversaciones
desenfadadas, espontáneas, ligeras y explícitas, porque aquí todo es muy
explicito quizás demasiado. Pero es precisamente todo este conjunto el que te hace
pensar y reflexionar constantemente sobre lo que estás viendo, no hay nada
gratuito y si lo hubiera está bien mostrado y contado que es lo único realmente
importante.
Todos los personajes se sinceran entre ellos o
abiertamente a la cámara cuestionándose constantemente lo que están haciendo y
para qué lo están haciendo demostrando una espontaneidad y una sinceridad que
se agradece cuando alguien ve una película de este tipo. Presentada con éxito en el pasado (y cada vez más
reputado) festival de Sundance donde su radicalidad fue bien recibida por la
mayoría de los asistentes.
Los 40 minutos censurados de Cruising nunca se mostraron
públicamente pero desde luego esta película nos hace imaginar como se sintió Al
Pacino al sumergirse en un mundo donde la palabra tabú simplemente no existe.
Fer Cruz
No hay comentarios:
Publicar un comentario